El agua es vida, y el cuerpo humano está conformado en casi un 70% por ella.
Indispensable para nuestra vida y salud, el agua está presente en nuestro día a día en muchos alimentos, y ofrece innumerables beneficios y ventajas que van más allá de sólo hidratar.
El consumo diario de agua:
- Alivia la sensación de fatiga;
- Aumenta la energía;
- Estimula la pérdida de peso;
- Elimina las toxinas;
- Aumenta el sistema inmunológico;
- Mejora la salud de la piel;
- Mejora el humor;
- Mejora la función renal;
- Previene los cólicos;
- Contribuye al alivio del dolor de cabeza;
- Ayuda a mantener la temperatura corporal;
- Mejora la digestión y absorción de los nutrientes.
Y la lista no se detiene aquí. Consumir agua también acelera nuestro metabolismo, por lo que promueve una mayor quema de la grasa almacenada, lo que contribuye de forma eficaz en la promoción de un tiempo mayor de saciedad. Así, ayuda, y mucho, en la pérdida de esos kilitos de más.
Pruebe colocar limón u otra fruta cítrica en su vaso para mejorar la alcalinidad y de esa manera aún serán mayores los beneficios.
Y recuerde, el consumo de agua es libre. Beba todo lo que pueda, pero siempre teniendo como punto de partida un mínimo de 8 vasos diarios. Si usted es de las que bebe mucha agua y se tiene que levantar de noche para ir al baños, aprenderá un truco maravilloso para dormir plácidamente hasta el día siguiente:
También practique ejercicios físicos y consuma alimentos saludables.