Entre la amplia gama de aceites esenciales, el aceite de linaza tiene una alta concentración de ácido alfalinolénico (ALA), una forma de grasa omega 3 que aprovecha el organismo para mejorar su funcionamiento. Es extraído de la semilla de lino mediante un proceso de presión en frío y ayuda a regular funciones vitales para el cuerpo.
Acompáñenos a conocer algunas de las propiedades y beneficios de este aceite, las diversas maneras de consumirlo, las dosis recomendadas y algunas precauciones que debe tomar en cuenta.
Propiedades y beneficios del aceite de linaza
El aceite de linaza es muy preciado por sus efectos sobre la salud. A continuación una breve lista con algunas propiedades y beneficios de esta joya para la salud.
Efecto antiinflamatorio
Los ácidos grasos omega 3 actúan contra la inflamación de órganos y músculos. Es ideal para enfermedades como la artritis porque desinflama las articulaciones y disminuye el dolor. Como antiinflamatorio, también puede usar el aceite de sándalo y el aceite de lavanda.
Función cardiovascular
Mejora la función cardiovascular porque reduce la presión arterial, los niveles de colesterol y desinflama las arterias, creando un cuadro preventivo de enfermedades coronarias como la arterioesclerosis.
Efecto laxante
Favorece el movimiento de los intestinos y lubrica el colon, haciendo que disminuyan los cólicos. El efecto laxante hace que mejore la función digestiva y promueve la pérdida de peso. También acelera el metabolismo, lo que ayuda a quemar grasa acumulada.
Reduce el azúcar en la sangre
Mejora el aprovechamiento de la insulina, dificultando el almacenamiento de carbohidratos como la grasa y controlando los niveles de glucemia. Está recomendado para personas que sufran de diabetes.
Además el aceite de linaza incrementa el rendimiento deportivo, regula la menstruación, alivia los síntomas de la menopausia, mejora la función cerebral, retrasa el envejecimiento celular y fortalece la piel, el cabello y las uñas.
Cómo tomar aceite de linaza
La linaza suele comercializarse en tres presentaciones: como semillas, aceite líquido y cápsulas blandas. A continuación algunas consideraciones sobre cómo consumir este producto.
Úselo crudo
El aceite de linaza es un gran aderezo para ensaladas y un apetitoso ingrediente para las salsas, pero debe usarse crudo. Cuando este se calienta comienza un proceso de oxidación que degrada sus componentes y hace que sus propiedades beneficiosas desaparezcan.
Consúmalo a diario
Muchas personas consumen una cucharada de aceite de linaza tres veces al día. Aumentar la ingesta podría hacer que la piel se vuelva grasosa y se produzcan espinillas y otros brotes epidérmicos.
Mézclelo con zumos naturales
Es frecuente que el aceite de linaza sea consumido junto a otras bebidas para disimular su sabor, principalmente zumos naturales de fruta. No exceda la dosis de tres cucharadas al día.
Añada semillas en sus comidas
Puede molerlas o agregarlas enteras a cereales, sopas, salsas y ensaladas. No tome más de una cucharada de semillas de linaza al día. Molidas en forma de harina podrán espolvorearse sobre panes, panqueques y muffins.
Precauciones con el aceite de linaza
Algunos estudios señalan que el aceite de linaza interactúa con medicamentos anticoagulantes, con las estatinas para el colesterol y con los tratamientos para las diabetes. Si toma regularmente estos medicamentos debe consultar con su médico antes de incluir este en su dieta.
Aprenda a preparar una mascarilla para la cara con linaza viendo el video a continuación:
