La pandemia de coronavirus está mostrando la verdadera cada de las personas para con el prójimo. Mientras que por un lado existen personas que están dispuestas a ayudar en todo lo que pueden donando comida, haciendo mascarillas, o incluso médicos jubilados que deciden volver a ejercer la profesión, por el otro están aquellos que muestran su peor cara. Un claro ejemplo es un hombre que no tuvo escrúpulos para dejar en la calle a su esposa. Sí, así es, por muy increíble que parezca, abandonan a una mujer en la calle después de tener síntomas de la covid-19 en Bolivia. El motivo que llevó a su esposo a hacer esto fue el pavor a contagiarse con el virus.
En concreto, los hechos sucedieron el día 11 de abril, según reportó el diario El Deber. Cuando la mujer de 35 años de edad empezó a mostrar síntomas del coronavirus, su marido la echó de casa. Literalmente, este la abandonó en la acera. Para ser más exactos, la dejó sentada en una poltrona, tapada con una sábana y una máscara, todo con la finalidad de evitar al máximo las chances de poder infectarse de la covid-19.
La fotografía publicada por el periódico boliviano se volvió viral, ocasionado mucha indignación. Después de que se hiciera público en los medios lo ocurrido con esta mujer, un médico acudió al lugar donde se encontraba para examinarlo. En realidad, presentaba dificultades para respirar, tenía dolores en el cuerpo y había tenido fiebre el día anterior.
Después de que al atendiera, en el mismo sitio donde la había abandonado su esposo, sí en la calle, el doctor y un representante de derechos humanos se pusieron en contacto con las autoridades sanitarias locales y se trasladó a la mujer a un hospital.
Horas después, tras realizarle más pruebas, se pudo obtener el diagnóstico exacto de lo que tenía la mujer: amigdalitis. Debido a que su estado no era de gravedad, los sanitarios le dieron el alta y la enviaron de nuevo a casa.
El responsable de la red de salud en la región, Juan Saavedra, mencionó que cabe la posibilidad de que el Estado presente una acción penal contra el marido de esta señora por no haberla ayudado y, lo que es incluso mucho peor, haberla abandonado a su propia suerte, aunque tuvieran pocos recursos.